Acudir al psicólogo

¿Cuándo debes tomar la decisión de ir al psicólogo?

¿Eres infeliz? ¿Te cuesta tomar decisiones? ¿Evitas hacer frente a los problemas? ¿Te propones metas y eres incapaz de iniciar el camino para lograrlas? ¿No te gusta tu vida? ¿Te falta iniciativa? ¿Estás mal y no sabes por qué? ¿Sientes que todo te preocupa, qué no puedes dejar de darle vueltas a la cabeza? ¿Te sientes bloqueado?

Hay muchas razones para acudir al psicólogo, lo importante es estar dispuesto a tomar un papel protagonista en la terapia y, por tanto, en tu vida.

Para muchas personas, ir al psicólogo significa comenzar a descubrir un mundo que no conocían.

¿Cómo conseguimos ayudar?

La mayor parte de las veces que alguien acude a mi consulta, la solución a su problema es bastante diferente a lo que se había imaginado. Los psicólogos no damos una charla de una hora mediante la cual el cliente sale de nuestra consulta sale con una mentalidad y forma de ver la vida completamente diferente.

Las charlas milagro no existen, para provocar un cambio en alguien primero necesitamos darle fuerza, razones o motivaciones a esa persona para que lo genere por sí misma, con esfuerzo, implicación y constancia.

Una persona puede cambiarse a sí misma hasta puntos que quizás no se había imaginado, pero el primer paso es querer cambiar. El segundo es tomar la valiente decisión de tomar un papel activo en ese cambio.

Lo que quiero decir con esto es que los psicólogos no somos magos que damos una charla milagro que hace que nuestro paciente salga “curado” de la consulta. Somos el impulso y el punto de apoyo que necesitan algunas personas para reinventarse a sí mismas.

Si te decides a acudir, recuerda que nuestro código deontológico nos obliga a mantener en el anonimato a nuestros clientes, respetando la intimidad y privacidad de cualquier cuestión tratada en consulta.